a lo lejos nada me dice.
Sus sueños marcan la distancia
entre aceras gris cemento.
Mientras el puerto sigue su pulso
sus despedidas
sus holas.
Y la lágrima cae al vacio
barriendo el recuerdo del nunca
del nada
del siempre.
Entre historias cae la lágrima
me dice sus nombres
su fecha
su historia
Y las aguas gritan horizontes,
señalan lunas de enigmas y nostalgias.
Mientras la ciudad agita su batuta,
el puerto se mueve con látigo de aire.
La lágrima sigue en perenne viaje
su rostro lo vela
en lejanos recuerdos
en años pasados.
Maravilloso.
ResponderEliminar