Allá donde habiten mis sueños,
donde se encuentre mi yo.
Allá donde los arboles digan,
hacia allí me iré.
Donde los musgos indiquen sus nortes,
donde las palabras obliguen a sentir,
donde los marasmos dejen de hacerse,
hacia allí caminaré.
donde se encuentre mi yo.
Allá donde los arboles digan,
hacia allí me iré.
Donde los musgos indiquen sus nortes,
donde las palabras obliguen a sentir,
donde los marasmos dejen de hacerse,
hacia allí caminaré.
Donde tu turbación mantenga la calma
y las esperas se ciñan de gris,
donde las manos se agarren eternas,
hacia allí caminaré.
Y me dirán los nombres perdidos,
donde los libros se agitan por mi,
donde los días sean locuras
y las pasiones hablen por mí.
Se acabaron los páramos informes
de vegetaciones extrañas a ti.
Donde salgan los días eternos,
donde las rosas se nieguen a ir.
y las esperas se ciñan de gris,
donde las manos se agarren eternas,
hacia allí caminaré.
Y me dirán los nombres perdidos,
donde los libros se agitan por mi,
donde los días sean locuras
y las pasiones hablen por mí.
Se acabaron los páramos informes
de vegetaciones extrañas a ti.
Donde salgan los días eternos,
donde las rosas se nieguen a ir.
Ha sido una maravilla leerte. Vendré mas por aquí, me gusto mucho tu blog.
ResponderEliminarMis felicitaciones.