Vidas narradas
con sabor desencuentro.
Historias que
nunca
debieron escribirse.
Vacíos
con falsos infinitos
que siempre
salen derrotados.
Y ahora sólo
toca esperar.
A que suceda
todo lo que le dije.
Y que el tiempo
me haga justicia.
Poniendo
cada palabra en su sitio,
cada cosa en su lugar.
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