No queráis saber,
mejor no preguntéis.
Porque se han roto
todos los cristales
y porque nada
queda de aquella historia.
No busquéis
entre las arrugas de mis papeles.
Porque nada importa
y la carretera
años ha que la trazaron.
Ahora que sigo
de reto en reto,
de lucha en lucha
y de batalla en batalla.
Solo sé
que este cristal roto
a nadie le importa
a nadie le interesa.
Bellísimo.
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