Nunca es tarde
si los sentimientos siguen
firmes como el primer día.
Siempre sigues
cuando, sin desertar,
te acompañan las ilusiones.
Y poco importa
la vejez de tu cuerpo,
cuando tu alma
es libre,
cuando sueña,
y cuando grita
LIBERTAD.
Nunca es tarde
si los sentimientos siguen
firmes como el primer día.
Siempre sigues
cuando, sin desertar,
te acompañan las ilusiones.
Y poco importa
la vejez de tu cuerpo,
cuando tu alma
es libre,
cuando sueña,
y cuando grita
LIBERTAD.
Tierra negra
en la que sumerjo mis manos.
Tierra que rezumas vida,
ciclos,
mensajes.
Tierra negra
amarilla en verano,
ocre en otoño,
alba en invierno.
Tierra
de mis infancias y recuerdos.
Que mis pies pisaron
y cuyas hojas ocres,
moribundas
me acompañaban.
Lugar
de mis ingenuos pasados.
De caminos y paseos
y de cómplices sonrisas
con manos agarradas.
Y siempre, siempre
aquella tierra negra
en la que sumergía mis manos.