No te rindas
porque yo no pienso hacerlo.
No abandones
aunque parezcan
días de derrota,
ya nos llegarán días de victoria.
No te marches
aunque creas perder una batalla.
Porque me tienes a tu lado
siendo mis armas las tuyas.
y porque seguiré la pelea
en la trinchera contigo.
No tires la toalla
porque no estás sola
porque mi hombro será tu hombro.
Y te juro
que no dejaré que capitules
por muy duras que sean las tormentas
por muy terribles
que sean los combates.
por muy terribles
que sean nuestras guerras.